jueves, 13 de diciembre de 2012


Vecinos crean Er Banco Güeno
Los vecinos cambiaron el rótulo de la antigua oficina de Unicaja antes de abrir las instalaciones como comedor social. ::
Antonio Salas
Sorpresa y expectación en La Palmilla. Lo que ha sido una oficina cerrada a cal y canto durante siete años acabará, si nadie lo impide, como un comedor social para los vecinos sin recursos de esta popular barriada. Ayer ocuparon el local. Y todo, con el silencio de Unicaja (fuentes de la entidad explicaron que de momento prefieren no pronunciarse), el apoyo del grupo municipal de IU (Toni Morillas acompañó la acción), la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, el 15-M, y la Asociación de la Integración de la Comunidad Gitana Palma-Palmilla.
El portavoz de esta organización es Jesús Rodríguez, conocido en la barriada como El Chule, y quien desde hace años ejerce de líder social de la barriada, con numerosas actividades que intentan sacar del pozo a numerosos vecinos. El Chule estaba ayer al frente de los activistas que ocuparon la antigua sucursal. «No vamos a quedarnos de brazos cruzados viendo cómo la gente se queda sin casa y los niños no tienen qué desayunar antes de ir al colegio. La ocupación se hizo bajo el lema 'Dignidad ante la precariedad' y con un claro objetivo: evitar que las familias pasen hambre y sean desahuciadas. Medio centenar de personas secundaron la iniciativa, bautizada como Er Banco Güeno, en clara ironía a la reciente creación del banco malo.
La antigua oficina está ubicada en Francisco Cárter y ya luce el trabajo realizado desde hace un mes en la sucursal, acondicionada con hornilla, nevera, mesas, sillas y una alacena de alimentos que los mismos vecinos han aportado. En el interior hay al menos una tonelada de comida explicó Ángel, «lo suficiente para pensar que a partir de ahora 50 ó 60 personas puedan tener un almuerzo, y dependiendo de la respuesta ciudadana, desayunos y cenas».
Los vecinos destacaron que la ocupación busca crear un espacio de autogestión no asistencial. «El fin último no es dar de comer a nadie sino generar recursos, limpieza y personal de cocina para ayudar a los necesitados. Cuanto más gente venga a formar parte de Er Banco Güeno más recursos podremos dar», recalcaron para animar a los presentes.
Conscientes de que la ocupación de la sucursal cerrada es ilegal los vecinos aseguran que han escrito a Unicaja para informarles de la ocupación y pedir su cesión definitiva. «La única respuesta que nos queda es contraatacar para subsistir y usar estos espacios sin uso para sobrevivir de manera fraternal y solidaria», afirmó Ángel, que sin querer desvelar más datos que su nombre ayer se alzaba como portavoz en el manifiesto leído a los vecinos. Asimismo, Er Banco Güeno quiere crear oficinas de derechos sociales e información para afectados por la hipoteca próximamente.

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